
Has acabado la comida y llega el momento dulce, pero se te presenta un problema ¿quiero un helado fresquito o un trozo de riquísima tarta?
La solución perfecta es muy sencilla: una deliciosa tarta helada.
Si hay un postre que está presente en todas las cartas de restaurantes ese es la tarta helada. Da igual cuál sea el sabor que prefieras, las tartas heladas llegaron hace mucho para quedarse y siguen teniendo el mismo éxito que siempre, tanto en las grandes comidas de celebración como cuando quieres darte un capricho antes de volver al trabajo.
Es cierto que los helados no los inventamos nosotros, los romanos se nos adelantaron por unos cuantos siglos, pero en Somosierra estamos muy orgullosos de decir que fuimos la heladería de España en las que se hicieron las primeras tartas heladas. Era el año 1943, llevábamos solo 4 años abiertos, y la gente hacía largas colas para comprar nuestras tartas. Era sin duda el dulce de moda, daba igual que fueses un reputado escritor, político, médico o profesor: todos querían saborear nuestras tartas. ¡Incluso nos recomendaban para cuando te operaban de las amígdalas! Con un incentivo así la recuperación se hacía menos dura.
Ya no tenemos una sola tarta helada de bizcocho y helado, en nuestro catálogo puedes encontrar una gran variedad de sabores: nata, chocolate, limón, whisky, caramelo con toffee… Para todos los gustos tenemos una versión.
Con el paso de los años no solo no hemos perdido la tradición de las tartas heladas, hemos aumentado la variedad de sabores sin perder el cariño que le ponemos a todos nuestros productos ni descuidar la calidad que tanto nos caracteriza.
Este delicioso postre es una marca identitaria de la casa que siempre estaremos orgullosos de reivindicar. Si lo que buscas es el broche perfecto para una celebración, las tartas heladas Somosierra son una de las mejores opciones que tienes, 48 años de experiencia haciéndolas nos avalan.